Adjuntamos la sinopsis de la película facilitada por la distribuidora,
el comentario de Adriana Antía que editaremos como ficha, y una reproducción
del cartel.
Un abrazo, y hasta el jueves. Asociación Otrosojos.
SINOPSIS DE LA PELICULA:
En
Finlandia, en 1923, el paso de un cometa hizo que los habitantes de un
pueblo quedaran completamente desorientados; incluso una mujer llegó a
llamar a la policía denunciando que el hombre que estaba en su casa no
era su marido. Décadas más tarde, un grupo de amigos recuerda este caso
mientras cenan, brindan y se preparan para ver pasar un cometa...
COMENTARIO:
Lindo gatito
No
es preciso dominar conceptos como “Realidades fragmentadas”, “Colapsos
del estado cuántico” o “Coherencia y decoherencia cuántica” para
entender esta película. Ni tan siquiera es necesario conocer al pobre
gato de Schrödinger… aunque se hablará de ello.
Hay veces en que la ciencia ficción huye del efecto digital y prefiere poner toda la masa gris en el asador. Coherence puede
ser un paseo neuro-fatigoso, pero será difícil perder comba y salirse
del camino pese a todos los agujeros negros. Las grandes películas se
nutren de ideas brillantes y simples a la vez, y esta cinta es la
demostración ciencioempírica más palpable de que con cabeza, un salón de
estar, un director novel (James Ward Byrkit), cuatro duros y cinco días
de curro basta para casi rozar la brillantez.
James
Ward Byrkit y Alex Manugian (que se pluriemplea actuando infiltrado
como ”Amir”) trabajaron durante mucho tiempo la trama de la película,
estudiando cada una de las variables y decidieron llevar a cabo el
rodaje como si de una partida de rol en vivo se tratase. Tras el
casting, los actores sólo recibieron unas leves pinceladas sobre sus
personajes, así como una lista de objetivos a conseguir que cambiaba con
cada día de grabación. Todo lo demás fue fruto de la sorpresa y de la
improvisación. Los actores no sabían el destino ni de sus personajes ni
de los del resto. Asomados al vacío de lo desconocido, sintiendo el frio
de la quinta dimensión, se dejaron no obstante llevar y día tras día
todo fue casando, encajando como las piezas de un puzzle, encontrando
poco a poco su coherencia final.
Pero la ciencia ficción y las clases (un poco de CCC) de física cuántica de Coherence no
son más que una excusa para desnudarnos a fondo. Una reflexión acerca
de las aspiraciones personales, sobre cómo siempre hay una versión
mejorada de nosotros mismos y, casi seguro, más de una peor. De la
autoexploración mental, de los parones de sinapsis generalizados que
todos necesitamos de vez en cuando para poder reubicarnos y tomar
perspectiva. De las otras vidas que nos gustaría vivir, espejos
diferentes e ideales en los que vernos reflejados. Pero sobre todo
acerca de lo que hemos de sacrificar para obtener nuestro alter ego
ideal… Una crítica a la esencia del hombre que ansía por la perfección,
una oda a nuestra esencia más salvaje, violenta y natural.
Adriana Antía